A menudo los tecnicismos nos pierden y no sabemos qué nombre tiene cada cosa. En audiología, como en muchos otros sectores, esto también pasa. Es por eso que hoy vamos a clarificar qué tipo de audífonos son los retroauriculares. La respuesta es bastante simple: estos audífonos son los que se han llevado toda la vida y los que muchos tenemos en la cabeza. Es decir, aquellos que se colocan detrás del oído y están conectados mediante un tubo transparente o cable con el auricular que introducimos en el oído. De lo contrario, estaríamos hablando de audífonos intrauriculares.

El formato de los audífonos retroauriculares suele ser más grande que los intrauriculares y, a grandes rasgos, también pueden ser más potentes. En términos generales están pensados para cubrir cualquier tipo de pérdida auditiva. Desde pérdidas leves hasta pérdidas de audición profundas. No obstante, suele ser el que mejor funciona en pérdidas severas y profundas, ya que es capaz de amplificar el sonido con mayor grado que los intrauriculares.

Además, aunque en los últimos años se ha mejorado el diseño, dándole una apariencia más fina y elegante, sigue siendo el audífono ideal para personas con problemas de visión o dificultades para manipular. Existe la posibilidad de ajustar el volumen a través de una palanca o botonera, el mantenimiento es más fácil y cambiar la pila es un proceso sencillo.

¿Qué tipos de audífonos retroauriculares existen?

Principalmente, existen dos tipos de audífonos retroauriculares; BTE y RIC/RITE. Ambos se caracterizan por colocarse detrás del oído.

Audífonos retroauriculares BTE

Los audífonos retroauriculares BTE se dirigen principalmente a aquellos pacientes con una pérdida auditiva profunda, ya que son los más voluminosos y vistosos, aunque cubren todos los grados de pérdida. Es el modelo más clásico y reconocible por el público a pesar de que hoy en día no son los que más se utilizan. Su funcionamiento es el siguiente: la señal procesada es conducida por el audífono al canal auditivo mediante un tubo acústico. Éste termina en un molde a medida del usuario que puede ser de muchas formas, tamaños y acabados, según las necesidades específicas que tenga.

Durante los últimos años algunas marcas han perfeccionado la estética y algunos de estos audífonos llevan un nuevo formato de tubo llamado “Slim tube”. El “Slim Tube” imita la estética del formato RIC de manera que la estética es más discreta, entre otras cosas porque se pueden utilizar adaptadores universales, más pequeños que los moldes, que se colocan dentro del canal auditivo.

Audífonos retroauriculares RIC

Los audífonos retroauriculares RIC, o conocidos también como RITE, tienen una apariencia más discreta que los anteriores, sobre todo porque el cable que conecta el cuerpo del audífono con el auricular es mucho más fino que el tubo. En este caso, el adaptador es universal y no se necesita un molde personalizado para cada paciente, a diferencia, por lo general, de los retroauriculares BTE.

Este tipo de audífono es más sensible a la humedad y al cerumen, ya que parte de la electrónica se coloca en el conducto auditivo del paciente. Sin embargo, dado que el auricular es universal, será mucho más fácil cambiar la pieza al momento ante cualquier problema.

¿Para quién son especialmente aconsejables los audífonos retroauriculares?

Los audífonos retroauriculares están especialmente recomendados:

  • Para los niños. Los retroauriculares tienen un formato muy recomendable para las adaptaciones infantiles (<12 años). El principal motivo de ello es porque durante la época de crecimiento el oído modifica la forma y este formato permite ajustar los moldes sin tener que tocar el audífono. Por eso no es muy aconsejable que ningún niño lleve audífonos intrauriculares. Además, permiten que los más pequeños tengan más autonomía, ya que son más fáciles de manipular que otros modelos.
  • Para las personas que generan mucha cera en el oído. Este modelo de audífonos permite limpiarlos fácilmente y hacer un buen mantenimiento diario.  

La limpieza

Por norma general, recomendamos limpiar a diario los audífonos con un paño seco y suave. Para ello, antes de manipularlos, nos aseguraremos de tener las manos limpias y secas.

Mientras dura el proceso, es un buen momento para comprobar con detenimiento la salida del auricular. No debe estar bloqueada, ya que el sonido del audífono se distorsionará y entonces no se podrá escuchar nada.

¿Por qué elegir este audífono?

Podemos resumir las ventajas de usar este audífono en base a:

  • Durabilidad, son audífonos robustos y resistentes.
  • Posibilidad de elegir tipo de adaptador: molde a medida o tulipa universal.
  • Mayor amplificación del sonido, especialmente indicado para pérdidas profundas
  • Facilidad en el mantenimiento, cuidado y limpieza.
  • Estética cada vez más cuidada.
Su diseño ha revolucionado la forma de entender estos dispositivos y ahora, los audífonos retroauriculares son cada vez más discretos.

Ya sabes que nuestra máxima preocupación en Claso es tu salud auditiva y tu calidad de vida, y no vamos a dejar que elijas un audífono a ciegas. Te acompañaremos durante este proceso para elegir el audífono que mejor se adapte a tus necesidades, no lo dudes.