Los prejuicios sobre los audífonos que no queremos escuchar
¿Sabías que el 92% de los franceses estaría dispuesto a utilizar audífonos si lo necesitase?
Así de claro lo tienen. Este resultado confirma dos cosas: la primera es que la sociedad francesa no tiene prejuicios con los audífonos y la segunda es que, tal vez, podríamos poner en práctica su forma de pensar. O por lo menos, intentarlo.
El estudio, que se hizo con motivo del día nacional sobre la audición, reflejó una actitud positiva sobre el uso de audífonos. Además, los participantes señalaron que estaban satisfechos con el diseño y la funcionalidad de los modelos actuales y de cómo la alta tecnología estaba revolucionando el sector.
Por otra parte, el 57% por ciento de los participantes cree que los audífonos pueden ayudar a recuperar la audición de forma parcial o total, y un 60% está convencido de que el periodo de transición para volver a tener una vida normal con audífonos es relativamente breve. Atrás queda la idea de que los audífonos son solo para personas mayores o que van a llamar la atención.
Pero, ¿a qué se debe esta actitud tan positiva hacia los audífonos? Uno de los motivos podría ser que la sociedad ha asimilado que la pérdida de audición puede ocurrir en cualquier edad. Asimismo, también se han vuelto más responsables a la hora de cuidar sus oídos. De hecho, más del 50% considera que la pérdida de audición es principalmente el resultado de la exposición a ruidos excesivos en zonas de riesgo y a no protegerse los oídos.
Si hacemos hincapié en este estudio es porque no siempre se comparte esta forma de pensar. Los prejuicios sobre los audífonos son nuestro principal enemigo porque eso puede producir que las personas que lo necesiten, no busquen ayuda. ¿Y qué significa? Sobre todo, que la pérdida auditiva sigue evolucionando, llegando a fases complejas en las que puede ser total.
Los prejuicios sobre los audífonos solo nos hacen retroceder y empeorar nuestro estado de salud. Ya hemos comentado anteriormente que son muchos los estudios científicos que respaldan que la pérdida de la audición está asociada al riesgo de desarrollar demencia y depresión, padecer caídas o sufrir aislamiento social.
No es extraño, pues, que aparezcan campañas de sensibilización como la que ha lanzado la Asociación de Industrias de la Audición en los Estados Unidos. ¿El objetivo? Promover una mejor audición con el lema, ‘Hear Well. Stay Vital.’, que nos anima a oír bien para sentirnos vivos. Y es que, pensándolo bien, ¿quién no quiere sentirse vivo?